Hoy, en una nueva entrega (perdonen por la tardanza lo que pasa es que estamos teniendo unos problemas con la editorial y eso hace q se retrace todo el laburo) de las aventuras de las chicas por Nueva Zelanda.....
Pasaron muuuchas cosas desde la ultima vez que nos dignamos a dar señales de vida por el mundo bloggero, asi que vamos a intentar hacer una somera enumeración de los últimos sucesos.
Como es corriente por acá, las cosas cambiaron bastante en poco tiempo.
Por empezar, durante la ausencia de las chicas en el monte, 4 nuevos integrantes ingresaron a la casa. 3 chicos y 1 chica, todos chilenos.
Para esos momentos las chicas Aty y Caro, seguían en Gisborne pero ahora mejor ubicadas con flat costero y toda la pelota. En total estuvieron algo de un mes allá, trabajando en los viñedos clippeando (consiste en ubicar una especie de clips de plástico en las redes que protegen a las uvas de los animales y otras amenzas), entre otras yerbas.
Paralelamente mi vida continuaba sin mayores sobresaltos en el monte, un poco aburrida y homesick pero tranquila. Juan se pasó dos días enteros diciéndome: "tengo una sorpresa para vos". -Qué es Juan? dale, decime. Un perro? un horno eléctrico? orejas de elfo?....". -No.
Habiendo alcanzado la irritación de Juan su punto máximo, mi curiosidad insipiente decidió darle un respiro y me puse a cocinar. Y mientras me entregaba a la delicada tarea de cortar cebolla, una cabeza flotante dueña de una sonrisa familiar se asomó por el marco de la puerta..... "Hola Mi amor!!".... siiiiiiiiiii... era Aty! Atilia era mi sorpresa. Nos abrazamos besamos y estrechamos según las solemnidades que ameritan un reencuentro de tal porte y ahi nomás le dije "Me voy con vos para Gisborne, renuncié al laburo".
Paréntesis. Renuncié al laburo. Unos días atrás, en medio de un intercambio de opiniones con mi jefe, y algún que otro cruce de puteadas bilingüe. Así que pasé un par de días más al pedo que el estéreo de la van.
En conclusión el trío viajero se juntó de nuevo, viviendo en Gisborne con Martín, Matías (argentinos), Rodrigo (chileno) y Kerry (escosesa).
El 23 de febrero volvimos las 3 nuevamente al amado Monte y el 2 de marzo emprendimos con Zeta (jujuy) y el Colo (córdoba), un viajecito por el norte de la Isla Norte pasando entre otros lugares por Hamilton, Raglan, Auckland, Pakiri Beach, Paihia, Russell, Kerikeri, Cape Reinga, Coromandel Peninsula, etc.
El viaje estuvo increíble, los lugares muy copados y la compañía más o menos pero safaba jaja. Realmente hay que admitir que los 5 nos llevamos muy bien sacando las discuciones porfiadas que nos gustaban mantener.
Dato curioso para destacar del viaje: llegamos a Raglan (pueblito costero surfer pintoresco ubicado al oeste sobre el mar de Tazmania) paramos en una licorería a comprar algo de tomar para alegrar la noche y el manager me pide una identificación. Le muestro el pasaporte y me dice -"Argentina? -Si... estuviste ahÍ?. -Nací ahi" nos dice. Daaaaaaaaaaaaale pensamos con Caro, dejate de joder, este tipo nos está charlando. -"En donde?. -En Lomas de Zamora". jaja ok, no había chances de que se tratara de un kiwi jocoso haciéndonos una joda, el tipo claramente era argentino!.
Entre una charla y otra, Rolando -Argie para los kiwis- nos invita a pasar la noche a la casa vacía de su vecino previa cena en su hogar junto a la divina de Tania, su mujer. Resultó ser que este personaje tan simpático se vino un día de vacaciones y se terminó quedando.... 30 años.
Así pasamos 2 días en Raglan viviendo en la casa del vecino del argentino expatriado comiendo asado, dulce de leche y tomando fernet.
Retomando, volvimos de nuestro viaje y recuperamos nuevamente la tranquilidad de nuestro flat del monte, habiéndose ido ya los 4 chilenos que nos reemplazaron en nuetra ausencia y conformándose la familia una vez más por nosotras 3, Juan y Flavio.
Ya hablamos de Flavio alguna vez en el blog, el escosés de padres chilenos, que no tiene memoria y ama la joda, de esas personas que te querés llevar en versión de bolsillo para tenerlos siempre con vos.
La cuestión fue que Flavio tenía que volver a Escocia después de 1 año y medio viajando por el globo y emulando el ya nombrado tema de las despedidas, esta nos costó varias lágrimas.
Así fue que el sábado 20 de marzo tiramos la ventana por la casa e hicimos una fiesta despedida como se lo merecía nuestro flatmate, la que lamentablemente se cortó 2 a.m. cuando Ken (el dueño de la casa) nos dijo "amablemente" que las casi 100 personas que habían en la fiesta se tenían que dejar de romper las pelotas e irse a la mierda. Fue lindo mientras duró.
Y ahora llegamos a la actualidad, todo sigue "igual" se podría decir, Flavio se fue, teníamos que conseguirle una compañía masculina a Juan para evitar el colapso total de su tolerancia y hace unos días llegó Cristiano, un brasilero misterioso que de noche limpia y de día trabaja, por lo que no tuvimos mucha oportunidad de conocerlo mejor.
En lo que al tema laboral respecta, hace unos días, esperando que empezara el trabajo en las Packhouse (fábricas empaquetadoras de frutas), tuvimos la acertadísima idea (cuack) de hacer picking de kiwis, o sea recolección de los mismos. Lo que no sabíamos cuando le confirmamos al indio (los indios aca en su mayoría se dedican a hacer el contacto entre los potenciales trabajadores y los dueños de los campos, se les llama "contractors") que estábamos dispuestas a trabajar, fue que el trabajo consiste en calzarse una bolsa al estilo canguro que puede llegar a pasar 45 kg. cuando llena e ir juntandos los kiwis para despues vaciarla en un cajón de madera enooooorme. Cada cajón lleno se paga entre 8 y 13 dólares.... entre todo el equipo que recolecta! el cual en este caso consistía en 2 hombres y 7 mujeres. Entoooonces a las 5 horas de trabajar/morirnos lentamente decidimos que el esfuerzo no valía la pena y además en el transcurso del día recibimos el llamado "salvador" que nos comunicaba que la packhouse empezaba al día siguiente.
Finalizando, arrancamos la temporada de las pack, suuuuuuuuuuuuper agradecidas y contentas de tener trabajo y estabilidad económica nuevamente, empaquetando, mirando, cargando, soñando, respirando kiwis cada puto segundo de nuestras vidas, pero felices.
LIBERTÉ
Hace 12 años